Infertilidad

Según la comprensión de la Medicina China la abundancia de Sangre en el Útero y la plenitud del Sistema Renal son la base para quedarse embarazada.

¿Qué significa esto?

El Útero recibe influencia energética de varios Órganos. Para quedarse embarazada, es fundamental que cada uno de ellos esté equilibrado, que nuestra sangre sea abundante, que tengas energía disponible y que estas conexiones con el Útero sean armónicas. Si alguno de estos Órganos presenta una desarmonía, tienes insuficiencia de Sangre o estás debilitada energéticamente podrás tener dificultades para la concepción.

 

Factores que propician la concepción:

 

  • Buena irrigación sanguínea en el Útero.
  • Buen funcionamiento energético del Sistema Renal.
  • Libre flujo en la función del Hígado.
  • Sangre abundante en el Corazón.
  • Abundancia de Sangre y Energía disponible.
  • Libido y deseo sexual.

Factores que impiden la concepción:

  • Humedad o frío en el Útero.
  • Debilidad del Sistema Renal.
  • Depresión o bloqueo en la energía del Hígado.
  • Insuficiencia de Sangre de Corazón.
  • Debilidad del Sistema Digestivo.
  • Debilidad energética y sanguínea(Qi y Xue).

 

Si presentas irregularidades dolores menstruales, tu cuerpo ya te está dando señales de que tu organismo, energéticamente, no está funcionando correctamente, a la larga esto puede dar lugar a una dificultad o incapacidad para el embarazo.

 

¿Cómo os ayuda la Acupuntura?

 

En el Hombre

  • Mejora la calidad y la movilidad de los espermatozoides.

En la Mujer

  • Mejora el revestimiento uterino y aumenta el flujo sanguíneo al Útero.
  • Mejora la calidad de los óvulos.
  • Fortalece y nutre el Sistema Renal.
  • Regula la función del Hígado.
  • Mejora la producción de Sangre.
  • Fortalece la Sangre y aumenta la energía.
  • Aumenta la libido y el deseo sexual.
  • Reduce el estrés asociado a las dificultades para concebir.

 

*Es aconsejable recibir sesiones de acupuntura 3 meses antes de iniciar el proceso para preparar al cuerpo energéticamente y propiciar un entorno favorable para la fecundación y el desarrollo embrionario.